Fulanito de tal.

No me había fijado en ti y sin embargo quería que fueses tú quien estuviese esa noche, y casi sin darme cuenta nos fuimos acercando el uno al otro, y como diría Sabina "ya sabéis copas, risas y excesos..." incluso me acompañaste a casa cogidos de la mano, cosa que nunca antes habían hecho. Pero una, que ya es perro viejo sabía que todo acabaría al despedirnos.

Sin embargo, no fue así, volviste, volviste con ganas de conocerme, con ganas de estar conmigo, con ganas de hacerme sentir especial como nunca nadie antes lo había hecho; jamás me había sentido así. Pero como todo, lo que rápido empieza rápido acaba, y la verdad, hablando mal y pronto me jodio, me jodio tela, porqué no me dio tiempo a quererte, pero como dicen en la película Primos (la cual recomiendo) te pre-quise, te pre-quise mucho. Y me hiciste darme cuenta de como quería que me tratasen y no esperar menos de eso, y ahí tengo que darte las gracias.

Con el tiempo, ves las cosas desde otra perspectiva e incluso crees que echas de menos a esa persona, hasta que te das cuenta  de que lo que realmente echas de menos no es a la persona en sí, sino el como te hacia sentir.

 En fin, que a rey muerto rey puesto y si te he visto no me acuerdo.

Besitos folclóricos.